Ciro Fernandes nació en Uiraúna, en un pueblito de Paraíba, el 31 de enero de 1942, en época de la Segunda Guerra Mundial. De niño dibujaba en madera y en las paredes de la casa de sus abuelos. La sequía de 1858 llevó a Ciro, a un adolescente, a la ciudad de Natal (RN). Dos años más tarde, se cambió a la ciudad de São Paulo y se ganó la vida como obrero y pintor de casas. En 1961 llegó a Río de Janeiro y se mantuvo pintando, trabajando en carnicerías y pintando carteles de precios para comercios. Hasta que suya evolución fue trabajar en agencias de publicidad donde ocupó el cargo de director de Creativo en tres de ellas, fue ilustrador del diario “Jornal do Brasil”, y en el diario “O Globo”.

El arte de Ciro es la identidad de los folletos de cordel, publicaciones artesanales de cuentos rimados, que él ayudó a transformar en obras de arte. Propuso sustituir las fotografías que ilustraban las portadas por xilografías. Y así su talento de los cordelistas se complementó en imagen. Con una simplicidad cortante como las gubias que utiliza para tallar madera, Ciro transforma técnicas y conceptos del arte. Sus obras de arte pertenecen a importantes colecciones como el Museo Nacional de Bellas Artes de Río de Janeiro.

Además ilustra libros de autores como Raquel de Queiroz, Orígenes Lesa, Gilberto Freire, Autran Dourado, Ferreira Gullar, José Lins do Rego y Ana Maria Machado. Del mismo modo firma portadas de importantes músicos brasileños, como el que escribió cordel (Sérgio Ricardo), “História de João Joana”, de nada menos que Carlos Drummond de Andrade.
Es el único ilustrador que recibió el Premio Machado de Assis de la Academia Brasileña de Letras, por su trabajo en el libro “Cordelinho” de Chico Salles, y sus obras de arte se encuentran repartidas por paredes y colecciones.

Sus xilografías son la faceta más evidente de su inmenso talento, que además se traslada al lienzo.
Celebró sus 80 años de vida y sus 60 años de profesión con exposiciones en el Centro Cultural del Banco do Nordeste (CCBN), en Sousa, en Alto Sertão Paraibano, y en la Pinacoteca do Estado, en Natal. Incluso participó de la exposición “el Corpo Moderno”, en el Museo Municipal de Arte de Curitiba, que reunió obras de arte, entre dibujos, pinturas, grabados y esculturas, de Pablo Picasso y Cândido Portinari.